El joven novillero cartagenero de Galifa es el triunfador de la tarde taurina de Perín, donde conquista dos orejas y rabo.

18 años de edad y "muchas ganas". Lo que Emilio López Serrano decía hace unos días en la entrevista concedida a Cartagena de Hoy se ha podido ver sobre la arena de la plaza de Perín, donde ha sido el triunfador del festival taurino que con fidelidad cada año organiza la comisión de fiestas dentro de la mínima oferta del mundo del toro cada año en el municipio de Cartagena y que en esta ocasión atrajo a algo más de medio aforo, unas cuatrocientas personas.

El Morano, en su segunda cita con el público, saltó a la arena en el ecuador del festival decidido a darlo todo, levantado la primera ovación en la recepción del astado. Después se entregó ante un animal que acompañó, aunque bien es cierto que tuvo que trabajarlo bastante. Cuando en dos ocasiones el animal le pisó el capote, no se vino abajo. Al contrario, respondió con detalles de clase con los que también se ganó al respetable, cerrando de la forma más brillante posible a la hora de matar. Dos orejas le concedió la presidencia, que enseguida se ampliaron al rabo ante la insistencia popular.

La presidencia estuvo integrada por el concejal Nicolás Ángel Bernal, el guardia civil primero Juan Ramón Martín Garnica y las doctoras veterinarias María García López bernabert y Micaela Martínez Guerrero.

Los otros protagonistas fueron los rejoneadores Eduardo Vega y Juan Manuel Munera. Ambos pusieron un enorme empeño, pero no les acompañó sus adversarios, excesivamente pasivos. El segundo, natural de Torres de Cotillas, consiguió oreja y dos orejas, respectivamente en cada actuación, mientras que el manchego Vega, quien debutaba en la Región de Murcia, saldó sin premios su estreno y con una oreja el cierre.