El celebre joven fue el más presentes en la primera parte del concurso de chirigotas del Carnaval de Cartagena, donde también hubo un recuerdo para el indigente fallecido hace unas semanas. Incluye GALERÍA DE FOTOS y VÍDEO

El XIII Concurso Regional de Chirigotas ‘Ciudad de Cartagena’ comenzó con elogiable puntualidad en su nuevo (y acertado) formato de dos semifinales en El Batel, en lugar de una más que maratoniana jornada como en años precedentes. Catorce grupos son los participantes para esta edición, de los que cinco estarán en la final del viernes. Siete actuaron anoche y otros tantos lo harán hoy, también a partir de las nueve de la noche en el mismo escenario con Miguel Meroño y Silvia Mateo como maestros de ceremonias.

La sesión de ayer tuvo dos partes, con dos horas antes del descanso para el público (buena entrada sin llegar a llenar) y hora y media después, pues cada grupo empleó unos veinticinco minutos en su tipo. Si dividimos este certamen en ‘cuartos’ (como en el baloncesto), hay que comenzar hablando del primer cuarteto que pasó por las tablas. El popular y controvertido ‘Pequeño Nicolás’ estuvo presente en todos ellos, seguido, por orden de menciones, por la reclusa Isabel Pantoja. Pese a los masivos casos de corrupción, los políticos no hicieron acto de presencia. Sólo en dos casos hubo alusiones a los ‘chorizos’, en una de ellas, con un ingenioso chiste, en el que se le pide a Dios ciertas explicaciones porque no entendió la petición de acabar con los ‘chorizos’… pues lo que se quemó fue la fábrica de Campofrío (Los Salibillas). Fue un tramo de alegría (la música es contagiosa) y de sonrisas (por las letras), pero, quizás, faltaron carcajadas. También hay que destacar que los ‘selfie’ no faltaron en la mayoría de los grupos. 

Hubo diversas alusiones (siempre ensalzando) a Cartagena y un particular homenaje (a cargo de ‘Los echaos pa’lante’), siendo el destinatario el conocido y popular indigente cartagenero conocido por ‘El Vaquero’ o ‘El Pistolero’, quien fue encontrado muerto en la calle hace unas semanas. Su imagen en la gran pantalla desencadenó una (espontánea) gran ovación. También fue emotivo conocer que ‘Los inesperados’ se retiran de las chirigotas, por lo que anoche, salvo que se clasifiquen para la gran final, protagonizaron su última actuación.

Abrir el concurso no es fácil y esa misión le tocó a ‘Los Sangochaos’ de Murcia con el tipo ‘Me la sopla’. Llegaron como escoceses dominadores desde el pasodoble al rap, y dando mucho juego con sus falditas y colganderas gaitas. El primer grupo cartagenero fue ‘Los Inesperados’, como costureras de aguja y muchos hilos. Le sucedieron ‘Los echaos pa’lante’ con unos espartanos que acabaron transformándose en folclóricas a la orilla de la playa de la Cortina. ‘Un chirigota de pena’ fue el tipo con el que ‘Los Salibillas’ llevaron un entierro al escenario para cerrar la primera parte.

En la reanudación aparecieron, por ese orden, ‘La chirigota de Cabezo de Torres’ y ‘La chirigota de Caravaca’, ésta con el tipo ‘Taoreteando’ que acogiía a demonios, locos, emparadores, amgos, la justicia.. y hasta la muerte.  Con ellos se incorporó a la noche el nuevo rey Felipe. La noche la cerraron las cartageneras de ‘Las Chochonis’ con el tipo ‘Prohibido tocar mi basura’, con alusiones a los políticos ‘cubiertos de mierda’ y, por supuesto, al ‘Pequeño Nicolás’ (“cada vez que me hago la foto para el DNI el hijo de la gran puta sale al lao mío”) y la Pantoja (“por internet pidieron dinero para liberadla… y desde aquel día yo sólo escucho a Rocío Jurado”.