La comparsa Agora ha ampliado este año su sección adulta, que ya cuenta con 32 miembros, porque muchas de sus niñas ya han cumplido los catorce años y se han unido a las mayores. “Están ilusionadísimas y eso se nota mucho”, destaca Conchi Martínez, portavoz del grupo.

Agora cuenta actualmente en su sección infantil con 19 miembros. Este grupo coreográfico se creó en 2004 y su presidenta es Laura Céspedes Martínez, que el año pasado encarnó a Doña Cuaresma, “algo de lo que nos sentimos muy orgullosas. Además, otro miembro del grupo encarnó a Don Carnal”, precisa Conchi Martínez.

Agora aglutina a socios de diferentes barriadas de Cartagena. “Contamos con gente de José María Lapuerta, San Félix y otros muchos barrios. Toda la que viene con ganas de unirse al grupo, entra. Nos da igual de dónde provenga. El objetivo de todo esto es pasarlo bien y hacer carnaval. Ese es nuestro espíritu”.

De hecho, Conchi Martínez señala que en Agora no se fijan en las cualidades de sus miembros para el baile. “Si llega alguien con mucha ilusión, entra aunque no tenga muchas habilidades. No podemos olvidar que esto es una fiesta y que tratamos de promover el espíritu carnavalero. A veces es mejor que alguien tenga ganas que sus habilidades, porque se esfuerza más y los resultados pueden ser mejores”, indica.

Las socias de Agora no tienen un local concreto de ensayo. “Trabajamos donde nos dejan. Tenemos la ayuda del instituto de Barrio Peral y de la Asociación de Vecinos de la Urbanización Mediterráneo. Unas veces ensayamos en un sitio y otras en otro. No estamos con ninguna academia de baile. Laura, que es la coreógrafa, no tiene academia ni es profesora, así que ensayamos donde podemos”.

Los miembros de Agora comenzaron a trabajar en el mes de septiembre para tenerlo todo listo de cara a la presente edición de Carnaval. “Hemos tenido que trabajar muy duro porque este año la fiesta ha sido muy pronto. Esperemos que no haga demasiado frío y que no llueva”, señala Conchi Martínez.

El vestuario del grupo lo cosen ellas mismas. “Es un trabajo muy duro, pero compensa porque se hace con mucha ilusión. Es cierto que al final los días de Carnaval pasan muy rápidos, pero se disfrutan también muchísimo”, concluye Conchi Martínez.