“El estado Mar Menor está en un estado muy crítico, pero sus mecanismos de autoregulación siguen funcionando”, afirmó Ángel Pérez Ruzafa en la charla que ofreció en las jornadas ‘Molina, ciudad de Ciencia’. “Muchas cosas pueden cambiar ahora con la sensibilidad que existe, pues nos hemos dado cuenta que ni el turismo ni la pesca ni la agricultura son viables sin un ecosistema que mantenga su integridad ecológica para prestar bienes y servicios”, afirmó.

Ángel Pérez Ruzafa ofreció un amena conferencia sobre el Mar Menor en Molina de Segura, donde expuso cómo se había llegado a la situación actual, para después expresar que la ciencia es necesaria, “y sin información no es posible tomas decisiones ni responder preguntas ni tomar decisiones que sean acertadas”, dijo como primera conclusión. La mejor gestión no es la que soluciona problemas, sino la que es capaz de anticiparlos para no llegar a tenerlos, por lo que ignorar el conocimiento sale carísimo”. También dijo que el gasto en redes antimedusas (casi seiscientos mil euros cada verano durante veinte años) o arreglar playas que ha terminado así se hubieran aplicado en ciencia, otro gallo cantaría; la ciencia no es una varita mágica que elimina problemas, sino una herramienta para encontrar soluciones con un margen de confianza” y que “las verdades a medias también son muy peligrosas”, dijo en relación a las auténticas praderas que se han perdido, ·todavía quedan muchas incertidumbres y hay que tener cuidado con el uso que se hace de la información”.

También dijo que las medidas que se están aplicando parecen estar funcionando, pero que ahora han entrado vertidos por las riadas y por la cubeta sur, “y es ahí donde hay que actuar, y conseguir que las buenas prácticas agrícolas se impongan, pues nos jugamos mucho. Si al sistema se le cuida y se le da opción, tiene posibilidad de recuperarse, pero si se le presiona, se perderá de forma inexorable”. Afirmó que la falta de información "y las verdades a medias son muy peligrosas” y en el capítulo de preguntas de los asistentes, hubo interés en saber si el baño es peligroso en las actuales circunstancias, "en absoluto, lo que ocurre es que el agua no es cristalina como gusta".

La conferencia íntegra se puede escuchar en los tres vídeos adjuntos de José Valero.