Casi veinticinco años de experiencia en el carnaval da a la comparsa Inquietudes, que nació en 1990, solera para reclamar más colaboración a las asociaciones vecinales y más iluminación en las calles al Ayuntamiento. Incluye GALERÍA DE FOTOS

“Las asociaciones vecinales deben ayudar a las comparsas poniéndoles facilidades para que utilicen sus locales y no todo lo contrario. De otra forma es muy difícil que las comparsas salgan adelante porque no pueden hacerlo todo solas. No todas disponen de fondos para alquilar una sede donde trabajar. De forma altruista hacemos muchas cosas por el bien de la ciudad y por eso sería positivo que las asociaciones vecinales reconocieran nuestra labor y nos apoyaran”, señala María Ángeles Martínez, presidenta de Inquietudes.

Además, desde esta comparsa recuerdan que el carnaval necesita para lucirse una buena iluminación, “así que el Ayuntamiento debe tomar buena nota y asegurarse que en las calles por las que pasa el desfile haya la mejor luz posible. El cambio de recorrido es estupendo y ahora sólo les falta mejorar el tema de la luz”, indica María Ángeles Martínez.
Inquitudes nació en el barrio de Santa Lucía en 1990 y, en la actualidad, cuenta con 15 socias adultas y 25 niños. Ensayan en el local social del barrio de Santa Lucía, del que son originarias.

Comenzaron a elaborar su vestuario en septiembre aprovechando telas y estructuras de trajes de otros años debido a la crisis económica, por la que también se han visto afectadas. “Hemos hecho todo un arte del reciclaje”, indica la presidenta.

De momento no han decidido el nombre de su fantasía, aunque ya la tienen prácticamente ultimada. Lo que sí tienen claro es que, un año más, van a disfrutar del carnaval y a dejarse la piel para que el público disfrute con ellas.

* Galería de imágenes de diversos años del grupo: