Los cinco aspirantes al título del XI certamen regional de chirigotas han echado el resto en la gran final.

Cinco grupos que han salido al escenario dispuestos a poner toda la 'grasia' en el asador. Enfrente, un público cada vez más implicado, más cómplice de lo que sucede frente a ellos en el escenario. El resultado de este cóctel es una gran final, sea quien sea el ganador.

Cuatro grupos locales y uno extranjero pero habitual en esta gran cita, Beniaján, donde ya tiene sus propios admiradores. Los quejíos flamencos de Los Robinsones de la isla, las locuras de Los Acho Pijo, el amor tontorrón de Los Singuangos, las viudas alegres de Las Chochonis y los paraos bricolageros de Beniaján han conseguido que todos los asistentes (muchos, por cierto) ejercitasen de forma constante el músculo de la risa y las articulaciones que desembocan en aplausos.

Así, para la memoria quedarán desde una espectacular mierda (made in Los Acho Pijo) hasta la caja con herramientas más grande del mundo (llegada de Beniaján), pasando por el arte de convertir en humor las cenizas del marido (cosa de Las chochonis) y por la variedad de objetos que pueden alojarse en una maleta (para el viaje de Los Singuangos). Por supuesto, todo visto desde el tablao más jondo (creado desde la isla por los robinsones). La suerte está echada.

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